Por: Natalia Díaz
Crianza desde el alma y el ❤✨
Psicóloga, Especialista en #Neurociencia educativa, Coach en #PNL & #Mindfulness🧠
Descubre el propósito de una #crianzaconsciente y conectada 🇨🇱🇺🇲💫
Psicóloga, Especialista en #Neurociencia educativa, Coach en #PNL & #Mindfulness🧠
Descubre el propósito de una #crianzaconsciente y conectada 🇨🇱🇺🇲💫
CHILE
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Este artículo es para ti MAMÁ. Para ti que tienes una capacidad ILIMITADA para AMAR a tus hijos. Para ti que te parece inexplicable sentir algo tan intenso por alguien, pero que al mismo tiempo te cuestionas cómo tanto amor puede conllevar tanta ansiedad, agobio, estrés y dolor.
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Estás aquí porque tú elegiste y decidiste leer este artículo, por lo tanto me gustaría que te dieras un tiempo para responder de forma espontánea las siguientes preguntas:
- ¿Qué es lo primero que viene a tu mente al leer la frase “ser madre”?
- ¿Qué es lo primero que viene a tu mente al leer la frase “ser buen hijo”?
Puede que lo que hayas pensado en primera instancia te haga sentir emociones agradables y/o desagradables, y es natural, al igual que tú y otras mamás yo también hice este ejercicio.
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Y es que hoy quiero contarte que gran parte de esos pensamientos inconscientes y automáticos se adquieren en la crianza, durante los primeros 7 años de vida, siendo entonces la etapa más crítica y determinante para el desarrollo cerebral y emocional del ser humano. Durante esta etapa el cerebro es como una “esponja” y a su vez un “diamante en bruto” ya que absorbe todo lo que pase por los sentidos y presenta un potencial excepcional que jamás volverá a tener.
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En este período denominado “la primera infancia”, se crean las primeras conexiones neuronales de tu hijo, que son sus primeras asociaciones y aprendizajes a partir de su interacción con el ambiente, y que determinarán en gran medida su actitud y manera de percibir y enfrentar la vida.
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Para un niño o niña, su ambiente directo es su familia y escuela. Entonces todo lo que vea, escuche o sienta de ellos quedará grabado en su cerebro y almacenado en su subconsciente para reproducirse en la adultez de forma automática, como una “voz en OFF”.
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Dado lo anterior es que nuevamente te pregunto: ¿Qué se decía en tu familia acerca de ser madre? ¿La crianza era percibida como algo alentador o aterrador? ¿Qué características debía tener un niño para ser considerado un buen hijo?
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Todas éstas preguntas son clave para ir haciendo consciente lo inconsciente. Para darte cuenta si cargas o no con una mochila pesada; llena de creencias e ideas poco alentadoras acerca de la maternidad y de los hijos. Y siendo así, es muy probable que sea la causa de esta gran muralla invisible en tu crianza; la cual bloquea constantemente tu intento de conexión con el mundo emocional de tus hijos.
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¿Cómo puede ser posible? ¿Tanto puede influir un pensamiento?
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Según el modelo cognitivo de Albert Ellis (1913-2007): “Así como piensas; sientes, y así como sientes; actúas”, por lo tanto, cuando tus pensamientos, creencias y asociaciones de la maternidad y de los hijos son negativas y pesimistas, estos se verán reflejados en la calidad de tus interacciones con los demás y principalmente con tus hijos.
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¿Y qué puedes hacer para salir de ese círculo vicioso? Tranquila, que el mundo aún no acaba…
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Tal como dice el título de este artículo, “La Crianza Consciente puede ser la llave maestra para lograr entrar al corazón de tus hijos”
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¿Y de qué trata la Crianza Consciente?
- A diferencia de la crianza tradicional, aquí el foco no está puesto en el comportamiento de tus hijos, sino en tu propia evolución.
- La prioridad no está puesta en los resultados, sino que en el proceso.
- La prioridad no es controlar a tus hijos, sino que conectar con su mente y corazón.
- Aquí no existe el adulto-centrismo, es decir; tanto los adultos como los niños tienen los mismos derechos.
Por lo tanto el primer paso será “desconectarte para re-conectar”, y cuando hablo de desconectarte, me refiero a tener la valentía de mirarte al espejo y comenzar desafiar y soltar todos esos patrones tóxicos de creencias y pensamientos inconscientes que han estado ahí por años, y que no te aportan ni nutren para nada, y así recién podrás conectar con otros más saludables.
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El segundo paso será “resignificar tu rol y misión de madre” y “resignificar el rol y misión de tus hijos”, entendiendo que cada uno de nosotros es un ser único e inigualable, con un rol y misión de vida que va más allá de los cánones establecidos por la sociedad y cultura.
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Dando esos dos primeros pasos, te aseguro que comenzarás a recuperar los latidos de tu maternidad y estar mejor preparada para volver a sentirla y vivirla de una manera mucho más satisfactoria.
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“Conoce todas las teorías. Domina todas las técnicas, pero al tocar un alma humana, sé apenas otra alma humana”.
Carl Jung
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Si sientes que este artículo resuena contigo y quieres continuar avanzando, te invito a formar parte de mi comunidad llamada @neurocrianza_consciente, donde ya somos más de 15.000 familias dispuestas a cambiar el mundo desde la crianza.
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Un abrazo luminoso
NATALIA DIAZ
Fundadora de la comunidad @neurocrianza_consciente
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