Por: M.N.P. Cristina Ceballos
Nutrióloga infantil 🍏 Maestría en nutrición pediátrica🥝 Mamá 🧒
Asesoría en línea 💻 Centro Pediátrico en Buenas Manos 👩⚕️🏥
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Mérida Yucatán.
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Un día, cuando mi bebé tenía 8 meses, llegué a una tienda con él, la señora que nos atendió fue muy amable y comenzó a jugar con él, enseguida le ofreció un pan dulce…
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Hola queridas familias, hoy quiero contarles sobre un tema que siempre me preguntan en consulta, un tema de plática de café con amigas y para mí, como mamá y nutrióloga, es un tema del cual se necesita hablar, un tema en el que los profesionales de la salud tenemos el compromiso de informar. Si las familias se informan tendrán la oportunidad de obsequiarles un regalo de vida a sus peques, ¡Si! Un regalo de vida…Les voy contando despacito.
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Iniciaré explicando ¿Qué son los azúcares libres? los azúcares libres son mono y disacáridos que son agregados en la preparación de alimentos y bebidas por los encargados de su elaboración (empresa, cocinero o consumidor); también incluyen azúcares naturalmente presentes en miel, jarabes, jugos y concentrados de fruta (incluidos jugos naturales). Algunos nombres como los encontramos son: azúcar morena, azúcar refinada, dextrosa, glucosa, fructuosa, jarabe de maíz de alta fructuosa, jarabe de malta, melaza, sacarosa etc. En general, llegan a la alimentación de nuestros pequeños en los productos ultraprocesados, lamentablemente incluidos en muchos productos dirigidos a bebés.
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Es necesario saber en dónde y cómo puedo encontrarlos, pero en lo que necesitamos enfocarnos no es en prohibir, si no en aprovechar una oportunidad valiosísima para regalar salud a nuestros hijos. Durante el proceso de alimentación complementaria, los bebés se sumergen en el mundo de la alimentación y es en esta etapa en donde entre otras muchísimas cosas, conocen y aprenden a disfrutar los alimentos. Ofrecerlos naturales y frescos, promueve la aceptación de diferentes sabores y con ello la ingesta de una variedad de nutrimentos. Además, estas preferencias que se modelan en esta etapa única e irrepetible de la vida, permanecen en la niñez, incluso hasta la edad adulta.
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Cuando ofrecemos una alimentación complementaria sin azúcar, también promovemos la salud digestiva, una microbiota (o lo que antes se conocía como flora bacteriana) saludable, evitando diarrea, inflamación intestinal, dolor abdominal, retraso de crecimiento. Además, cuidamos la salud bucal de nuestros bebés ya que el consumo de azúcar altera los niveles de bacterias presentes en la boca, desmineralizando el esmalte de los dientes.
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Incluir una alimentación llena de variedad de alimentos promueven un crecimiento y desarrollo óptimo para nuestros peques, evitando a largo plazo complicaciones de salud. Por lo anterior, diversas entidades de pediatría coinciden en la recomendación de evitar el azúcar durante los primeros dos años de vida.
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¿No creen que vale la pena compartir esta información? Compartirla con las maestras, con las escuelitas, con los abuelitos, con los tíos, con la señora que le ofreció pan a mi bebé y con la comunidad en general.
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Muchas veces he escuchado que el mundo les ofrecerá azúcar así que me gustaría poner un granito de arena para decirle al mundo que cuidemos la salud de nuestros bebés…Ellos ya son dulces!
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M.N.P Cristina Ceballos Suárez
Cel. 9992177070 Centro Pediátrico en buenas manos. Mérida Yucatán.
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